Seguro que elegir el detergente más adecuado para la lavadora no es algo que te quite el sueño, pero alguna diferencia debe haber entre el detergente en polvo, en cápsulas y líquido, ¿no? Sí que la hay, pero elegir el adecuado para ti implica sopesar los pros y los contras de cada tipo de detergente. Eso es precisamente lo que te ayudará a hacer esta guía.
Polvo
El detergente en polvo, que es el tradicional para la colada, lleva en los comercios desde los años 30 del siglo pasado, aunque sin duda ha dado paso a los detergentes líquidos y las cápsulas durante las últimas décadas.
Ventajas
- Coste más bajo por colada.
- Tiempo de caducidad más largo.
- Tipo de detergente más eficaz para zonas con agua dura.
- El embalaje de cartón es fácil de reciclar.
- Mejor para mezclar con quitamanchas como la lejía sin cloro.
- Buen rendimiento en manchas de césped y barro.
Desventajas
- Cajas grandes y pesadas que son difíciles de transportar.
- Puede que el polvo no se disuelva por completo en los ciclos más fríos.
- Pretratamiento de las manchas más difícil que con el líquido.
- Posibilidad de dosificación incorrecta.
- Puede dejar residuos en el depósito de detergente.
En definitiva, si te preocupan los costes y vives en una zona con agua dura, puede que el detergente en polvo sea adecuado para ti, especialmente si tienes deportistas en casa. Solo tienes que recordar que transportar esas grandes cajas puede afectar a tu espalda.
Líquido
Los detergentes líquidos llegaron al mercado en los años 50 del siglo pasado y son los más populares, con un 75 % de las ventas.
Ventajas
- Más barato que las cápsulas.
- Muy eficaz en manchas de aceite/grasa.
- Excelente para pretratar las manchas.
- Disponible con gran variedad de aromas.
Desventajas
- Es fácil pasarse de la dosis.
- Puede que las botellas de plástico no sean reciclables.
- Son a base de agua, por lo que no interactúan bien con otros productos de limpieza como los quitamanchas.
- Son a base de agua, por lo que son pesados y su transporte resulta costoso para el medioambiente.
Si sueles enfrentarte a manchas de aceite y grasa con frecuencia, los detergentes líquidos serán tus mejores amigos. Pero si utilizas quitamanchas adicionales, el polvo puede ser la mejor opción.
Cápsulas
La popularidad de las cápsulas, un invento relativamente reciente, ha crecido con rapidez y superan en ventas a los detergentes en polvo. No hay duda de que son cómodas, pero es algo que se paga.
Ventajas
- No es necesario medir, así que son muy cómodas.
- No se supera la dosis, por los que los resultados son siempre los mismos.
- Ligeras y fáciles de usar, especialmente para personas mayores o discapacitadas.
- Pueden incorporar diferentes tecnologías de limpieza (cápsulas 3 en 1).
Desventajas
- Son aproximadamente un 50 % más caras por lavado en comparación con el detergente en polvo/líquido.
- No se pueden usar las cápsulas para pretratar las manchas.
- Existen casos de envenenamiento por confundir las cápsulas con caramelos.
- Se pueden atascar en el tambor y no disolverse correctamente.
Es la solución más cómoda, basta con introducir la cápsula en el tambor antes de lavar la ropa. Pero obviamente la comodidad tiene un precio y hay cuestiones de seguridad a tener en cuenta, especialmente si hay niños en casa.
Así que piensa en el tipo de colada que haces y tus circunstancias, y la próxima vez que estés en la sección de detergentes podrás estar seguro de que has elegido de forma acertada.