Tanto si eres un entusiasta de la repostería como un aficionado de comer solo un plato o un amante del asado de los domingos, el horno puede desatar tu potencial culinario. Pero todos tenemos que aportar nuestro granito de arena al medio ambiente, por lo que es importante prestar atención a la forma en la que se utiliza el horno. Sigue estos consejos y ayudarás tanto al medio ambiente como a tu bolsillo.
01.
Cocina varios platos al mismo tiempo
Aunque puede que requiera un poco más de planificación, cocinar varios platos al mismo tiempo es una forma excelente de hacer un uso más eficiente del horno. Conviene tenerlo en cuenta si preparas muchas comidas o cocinas grandes cantidades. Asegúrate de no sobrecargar el horno ni obstruir los ventiladores, ya que esto reducirá la eficacia.
02.
No esperes a que el horno se caliente
Muchas recetas de cocina indican que tienes que calentar el horno a una temperatura determinada antes de introducir el plato. Aunque las temperaturas precisas pueden ser importantes para determinados tipos de horneado, puedes poner la mayoría de los platos dentro del horno en cuanto lo enciendas. De esta forma, aprovecharás el calor que genera el horno directamente desde el principio.
03.
Apaga el horno antes de tiempo
Si apagas el horno unos cinco minutos antes de que el plato esté listo, el calor residual de la cavidad continuará cocinando tu creación culinaria sin utilizar energía. No hay nada más eficiente que eso.
04.
No abras la puerta del horno durante la cocción
Es cierto que a veces tendrás que abrir la puerta del horno para mover la comida o escalonar la cocción de los platos, pero intenta reducirlo al mínimo. Cada vez que abres la puerta, el calor sale de la cavidad. El horno tendrá que trabajar más para que la cavidad vuelva a alcanzar la temperatura deseada. Así que, si solo tienes que echar un vistazo para ver cómo va la comida, hazlo a través del panel de cristal.
05.
Descongela bien los alimentos antes de cocinarlos
Si el horno tiene que descongelar los alimentos antes de empezar a cocinarlos, es obvio que tendrá que usar más energía. Descongela bien los alimentos congelados antes de cocinarlos para ahorrar energía.
06.
Utiliza bandejas de cerámica o vidrio
Las bandejas de cristal y cerámica retienen el calor mucho mejor que las de metal, lo que significa que puedes utilizar una temperatura ligeramente más baja. Una temperatura más baja significa un menor consumo de energía.
07.
Usa el programa de autolimpieza de manera inteligente
Si has decidido que es el momento de limpiar el horno y quieres utilizar una función de autolimpieza pirolítica, hazlo justo después de haber utilizado el horno para cocinar. De esta forma, el horno ya estará caliente y necesitará menos energía para alcanzar la temperatura extremadamente alta necesaria para la limpieza pirolítica.
08.
Mantén el horno limpio
Un horno limpio se calienta más rápido y distribuye el calor de forma más eficaz, lo que hace que sea más eficiente energéticamente.
09.
No pongas papel de aluminio dentro del horno
Los hay que ponen papel de aluminio en la parte inferior del horno para recoger la grasa o las salsas que caen por el lateral de la bandeja.
Aunque esto puede parecer una buena idea, la superficie reflectante del papel de aluminio altera la distribución del calor dentro de la cavidad. Además de esto, también puede obstruir el ventilador del horno, reduciendo su eficacia.
Eso es todo. Sigue estos consejos y utilizarás el horno de la forma más eficiente posible.