La eficiencia energética de una secadora depende de varios factores, incluyendo la tecnología utilizada, el diseño y la capacidad. Las secadoras modernas, como las de Beko, están equipadas con tecnologías avanzadas que optimizan el consumo de energía. Estas tecnologías incluyen sensores de humedad que ajustan automáticamente el tiempo de secado, programas de secado automático que adaptan el ciclo según el tipo de tejido y la carga, y motores de alta eficiencia que consumen menos energía.

Además, el diseño de las secadoras juega un papel crucial en su eficiencia energética. Las secadoras con tambor de acero inoxidable y sistemas de flujo de aire optimizado reducen el tiempo de secado y el consumo de energía. La capacidad también es importante, ya que una secadora con la capacidad adecuada para tu hogar puede evitar ciclos de secado adicionales, ahorrando energía.