Hoy nos sumergimos en el mundo del mantenimiento de los electrodomésticos, específicamente, cómo cambiar la goma de la nevera. Este proceso, aunque puede parecer intimidante al principio, es más sencillo de lo que crees y esencial para el correcto funcionamiento de tu frigorífico. Acompáñanos en este paso a paso que te asegurará un sellado perfecto y una mayor eficiencia energética en tu electrodoméstico.
¿Cómo cambiar la goma del frigorífico?
La goma, o burlete, es crucial para mantener un sellado hermético que asegure la conservación adecuada de los alimentos, la eficiencia energética y la vida útil del frigorífico. Con el tiempo, este elemento puede desgastarse o dañarse, lo que hace necesario su reemplazo. Aquí te explicamos cómo cambiar la goma del frigorífico en 5 pasos sencillos.
Prepara los materiales
Antes de empezar, asegúrate de tener a mano todos los materiales y herramientas necesarios. Necesitarás una goma de repuesto compatible con tu modelo de frigorífico, un destornillador, y posiblemente, un secador de pelo para flexibilizar la goma. Es importante que la goma de repuesto sea del tamaño y forma correctos para tu modelo de frigorífico.
Destornilla las bisagras
El siguiente paso es desmontar parcialmente la puerta para acceder más fácilmente a la goma dañada. Esto generalmente implica aflojar o retirar las bisagras que sujetan la puerta al cuerpo del frigorífico. Dependiendo del modelo, puede que necesites destornillar completamente las bisagras o simplemente aflojarlas lo suficiente para poder maniobrar la puerta y la goma.
Quita la goma vieja
Con la puerta adecuadamente ajustada, procede a retirar la goma vieja. Este paso debe hacerse con cuidado para no dañar la puerta o el encaje de la goma. La mayoría de las gomas están encajadas en un surco o fijadas con tornillos pequeños, así que verifica cómo está asegurada la tuya antes de proceder.
Flexibiliza la nueva goma
Una vez retirada la goma vieja, es posible que la nueva necesite ser flexibilizada antes de la instalación, especialmente si ha estado guardada o doblada. Puedes hacerlo calentándola ligeramente con un secador de pelo. Esto la hará más manejable y fácil de instalar en el surco o marco de la puerta.
Coloca la nueva goma
Con la nueva goma ya flexible, es momento de colocarla en la puerta. Comienza desde una esquina y ve presionando la goma en su lugar, asegurándote de que quede bien ajustada y sin pliegues. Si tu frigorífico requiere que la goma se atornille, hazlo de manera uniforme para evitar distorsiones en el sellado.
Mantén la puerta cerrada
Una vez instalada la nueva goma, es recomendable mantener la puerta del frigorífico cerrada por unas horas para asegurar un buen asentamiento de la goma en su posición. Esto ayudará a que tome la forma correcta y mejore el sellado.
Eficiencia óptima de la nevera con Beko
Cambiar la goma de la nevera es una tarea sencilla pero crucial para el mantenimiento de tu frigorífico. Siguiendo estos pasos, no solo asegurarás un buen sellado que conservará mejor tus alimentos, sino que también contribuirás a mejorar la eficiencia energética de tu hogar.
Recuerda que los frigoríficos Beko están diseñados con tecnologías avanzadas que aseguran una conservación eficaz de los alimentos, una eficiencia energética superior y un impacto ambiental reducido.